Convocados por el pueblo maya de Homún y el Comité Kana’an Ts’onot, decenas de personas clausuraron simbólicamente ayer viernes al mediodía la megagranja de cerdos de la empresa Kekén en esta comunidad, en protesta porque, dicen, contaminará los cenotes, que son fuente de empleos para habitantes de municipios de esta zona, y el manto acuífero de Yucatán.
Mientras los inconformes ponían las cintas de clausura, integrantes de la asociación civil Equipo Indignación, que los apoya, informaron que el cierre simbólico se debe a que Kekén no cumplió con lo acordado con la población: se comprometió a no poner en funcionamiento la granja hasta que acaben los juicios promovidos, pero los pobladores vieron llegar camiones con cerdos, pese a que las instalaciones no tienen aún biodigestores. Ante las rejas de la granja, decenas de pobladores dijeron estar molestos y gritaron consignas contra el gobernador Rolando Zapata Bello (cuyo sexenio concluirá el domingo 30) por permitir la construcción de la megagranja y con ella poner en peligro el agua del subsuelo que alimenta a los cenotes. Puntualizaron que la zona donde se construyó la granda es un centro de recuperación de las aguas pero será contaminado por la granja. Como parte de la protesta, colocaron banderas con los colores mayas: rojo, negro, blanco y amarillo en la reja principal del predio. Además, niños y adultos mostraron carteles con leyendas como “Homún no se vende, Homún se defiende”, “Sra. Alicia García ya no más corrupción por parte del grupo que usted maneja, fuera la megagranja, vayánse a otro lugar, no les queremos en Homún” y “Vila no pierdas la Ruta de los Cenotes por la Ruta de los Cerdotes” en alusión al panista Mauricio Vila Dosal, quien el lunes 1 de octubre próximo asumirá la gubernatura.
