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Un presunto fraude inmobiliario salió a la luz pública: un grupo de ejidatarios de Ucú denunció que abogados de la Notaría No. 8 de manera dolosa realizaron los trámites para que un grupo de empresarios se adueñe de poco más de 300 hectáreas de tierras.

Ayer al mediodía, los ejidatarios realizaron una protesta en la Fiscalía General del Estado, ubicada en el Periférico de esta ciudad, para denunciar los hechos y pedir ayuda a la dependencia para que se castigue a los responsables del despojo.

El grupo fue atendido por el vicefiscal de Investigación y Procesos, Jesús Armando Pacheco May.

Los quejosos indicaron que el ejido de Ucú vendió 315 hectáreas de tierras y los empresarios pagaron a 10 pesos el metro cuadrado. Para hacer los trámites el comprador, a quien no quisieron identificar, contrató a la Notaría No. 8.

Acusaron de manera directa a los abogados Hernán Conde y Luis Silveira Cuevas.

Según lo expuesto, el caso es que cuando se realizó la escritura de las tierras, en lugar de las 315 hectáreas que se pactaron, se adueñaron del doble de superficie.

Las tierras que se reclaman tienen un valor de 20 millones de pesos.

Aseguraron que acudieron a las autoridades agrarias, pero no les hicieron caso y denunciaron que la Procuraduría Agraria se coludió con los empresarios inmobiliarios para favorecerlos y perjudicar a los ejidatarios.

Denuncia penal

Al toparse con pared, indicaron, decidieron acudir a la Fiscalía para solicitar ayuda y denunciar el presunto fraude inmobiliario.

El grupo de inconformes fue atendido por el vicefiscal Pacheco May, quien les dijo que analizarían el caso.

Ayer mismo se interpuso la denuncia penal contra Conde Barahona, Silveira Cuevas y Adolfo Dzul Canché, chofer de Silveira Cuevas, porque consideran que igual participó en el ilicito.

“Nosotros lo que buscamos es que se haga justicia”, indicó uno de los ejidatarios.