Fachada de la cantona donde un carnal decidió poner fin a sus broncas

Ayer sí que les tocó chambear a la Policía Investigadora y a la Fiscalía General del Estado, pues tomaron conocimiento de dos muertes ocurridas en Mérida, una de ellas, un suicidio.

El primer hecho ocurrió ahí por los vergeles, específicamente en Vergel II, en la calle 21 entre 10-D Y 10B. Poco antes de las 6:30 de la mañana, fue hallado el cuerpo sin vida de Francisco Gómez Navarrete, fue su esposa quien descubrió la macabra escena, cuando bajó de su cueró y halló a u marido tieso y colgado… de un hamaquero en una bodega de la casa.

La mujer, al ver la escena, se despertó por completo y corrió a la cocina por un cuchillo con el cual cortó la soga en un intento de salvar a su marido, pero no lo consiguió. Paramédicos de la SSP llegaron al lugar de los hechos, pero sólo pudieron confirmar el deceso del difunto.

Se le paró dentro del carro

Otro que jaló al valle de los fríos fue un chuchulito de unos 86 años de edad, quien falleció de un infarto fulminante mientras le daban un aventón al hospital en la avenida Yucatán con 62 de Jardines de Mérida. Según se supo, el difunto era trasladado al hospital, pero ya no alcanzó a llegar, pues su corazón dijo “nel, ya no chambeo”. Sus familiares indicaron que mientras iban en el auto, placas YZR-387-A, se dieron cuenta de que el don no podía respirar, por lo que detuvieron la nave y comenzaron a solicitar ayuda. Por suerte, en ese momento pasaba por ahí una ambulancia de la SSP, quienes intentaron reanimarlo, pero no hubo mucho qué hacer.