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Carlos Burgos y su morrito, de milagro se salvaron de sufrir lesiones graves luego que la motocicleta en el que viajaban fue atropellada por el automóvil Honda, placas ZAD-732-A, que era conducido por un extranjero que se voló el alto en la calle 82 con 31 en el centro Progreso.

El accidente que ocurrió ayer jueves a las 5:30 de la tarde causó consternación entre los numerosos curiosos que se reunieron en la esquina donde sucedió el hecho, pues pensaron que el niño había resultado con heridas graves.

El menor de unos cinco años de edad, no dejaba de llorar por el susto y el golpe que recibió al cae. Su papá lo protegió con su cuerpo cuando chocaron la moto por el automóvil.

Paramédicos de la Policía Municipal arribaron al lugar y atendieron al niño y a su papá, quienes fueron trasladados a la clínica del Seguro Social para recibir atención médica, luego que los estabilizaron a bordo de una ambulancia.

El accidente fue ocasionado por un ciudadano estadounidense no respetó el alto.