jkhkjhkdjhfjdkfkjdfdf

Familiares, amigos y habitantes de Huhí dieron ayer martes el último adiós a los esposos Emilio Canché Ac y Julia Chan Aké y su hijo Luis  Alberto Canché Can, de 66, 65 y 36 años de edad, respectivamente, quienes murieron el domingo por las lesiones que sufrieron en un accidente de tránsito.

Los deudos aún no dan crédito de los lamentables hechos que enlutaron a una familia y al pueblo. El trágico percance ocurrió el domingo 13 a las 7 de la mañana, cuando  la camioneta Dodge RAM 2500, placas TA-3560-G, se salió de la carretera Izamal-Tekal de Venegas, en la “curva del diablo”, a la altura del hotel Hacienda Sac Nicte, y se estrelló contra un árbol. En la primera cabina viajaban los esposos; iba como copiloto del guiador, su hijo Jorge Israel Canché Chan, de 25 años de edad, quien sufrió fracturas en ambas piernas. En la noche del mismo domingo murió Luis  Alberto, en el hospital Agustín O’Horán en Mérida. En total 12 integrantes de la familia iban a Tizimín a cumplir su promesa de venerar a los Santos Reyes. 

Nueve siguen lesionados, entre ellos cinco niños.

Anteayer lunes, a las 5 de la tarde, llegaron los cuerpos de los esposos a la casa que habitaron, para el velorio. Una  mañana desoladora vivieron ayer martes quienes participaron en el cortejo fúnebre de la casa de los difuntos a la céntrica parroquia San Pedro y San Pablo, donde se  ofició una misa de cuerpos presentes.

Tras la ceremonia, los tres féretros fueron sacados de la iglesia y subidos a tres camionetas; luego se reanudó el cortejo fúnebre.

Habitantes reunidos en el parque principal y el Palacio observaron que los tres ataúdes salgan de la iglesia.

A la 1:30 de la tarde, la pareja de esposos y su hijo fueron sepultados en el cementerio municipal de Huhí.