Los niños no tienen ni ropa para ponerse

Rubí Güémez Dzib, quien perdió su casa y pertenencias tras un incendio provocado anteayer domingo, denunció en la Fiscalía a su expareja José Manuel Cupul Och, quien ocasionó el siniestro.

La joven madre de tres niños, de 7, 6 y 2 años de edad, se quedó en la calle, según relató su tía Guadalupe Jesús Güémez Martín.

La mujer dijo que su sobrina “no ha querido asomarse” a la casa luego de la tragedia y está pidiendo posada con sus padres.

Los niños se quedaron sin ropa, pues se quemó toda, y no tienen dónde dormir.

Guadalupe Güémez aseguró que lo que más le preocupa es que le hagan daño a su sobrina, pues su expareja amenazó con matarla cuando salga de la cárcel. Según relató, desde hace casi tres semanas la pareja se separó porque Cupul Och es agresivo, incluso estando su sobrina presente rompió los cristales del cuarto donde vivían y por temor a que le hagan daño a ella o a sus hijos, fue con sus padres.

Sin embargo, Cupul Och le dijo que si la casa no es de él tampoco será de ella, ya que tuvo que vender su motocicleta y “hasta su sangre” para pagar el terreno donde el Ayuntamiento les construyó la habitación. Guadalupe Güémez declaró que hace unos días que Cupul Och fue a su casa a contarle que iba a quemar la casa, incluso se lo dijo a Rubí, pero no le creyó y le contestó: “Haz lo que quieras”.

La tía comentó que anteayer, como a las 9 de la mañana, vio pasar a Cupul Och, quien vive junto a la casa de su sobrina, y minutos después comenzó a sentir olor a quemado, por lo que de inmediato salió con sus cubetas de agua pero ya era demasiado tarde, pues con la gasolina que tiró enseguida se prendió la casa.