A las 07:00 horas de este domingo, la Tormenta Tropical Narda, se localizó a 120 kilómetros al sur de Zihuatanejo, Guerrero, con vientos máximos sostenidos de 75 kilómetros por hora, rachas de 95 kilómetros por hora y se desplazaba hacia el noroeste a 14 kilómetros por hora.
De acuerdo con la información del Servicio Meteorológico Nacional, las precipitaciones recientes han reblandecido el suelo en algunas regiones de Guerrero, por lo que podrían registrarse deslaves, deslizamientos de laderas, desbordamientos de ríos y arroyos o afectaciones en caminos y tramos carreteros.
También se esperan inundaciones en zonas bajas y saturación de drenajes en sitios urbanos. Por ello, se exhorta a la población a extremar precauciones y permanecer atenta a los avisos de Protección Civil y de las autoridades estatales y municipales.
Personal de la Secretaría de Protección Civil Guerrero, en Chilpancingo, retiró y desazolvó alcantarillas taponadas en diversos puntos del encauzamiento Río Huacapa, asimismo, retiró material pétreo de la cinta asfáltica a consecuencia del colapso de una parte de la barda perimetral de la 35 zona militar, así como lodo y piedras acumulados por las intensas lluvias de la noche-madrugada en avenidas principales de la capital.
A las 06:11 horas, se cayó un espectacular en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, cerca del poblado El Veinte, municipio de Tecpan de Galeana, situación que obstruía ambos carriles y era atendida por Protección Civil municipal.
A las 10:15 de la noche, Protección Civil del Estado informó que la Catedral de Chilpancingo había sufrido inundaciones.
En Acapulco también se inundó un hospital y una casa; en Zihuatanejo se deslavó un cerro; en Atoyac resultó afectada una casa y varios municipios de la entidad se habían caído 14 árboles, lo anterior hasta las 10:15 de la noche.
Protección Civil de Guerrero informó que mantiene una constante vigilancia sobre la evolución y trayectoria del fenómeno meteorológico, para emitir los avisos y alertamientos oportunos para la población.
Recomienda mantener medidas de cuidado, como alejarse de zonas de inundación, de márgenes de ríos, lagunas y presas; así como de laderas inestables propensas a deslaves o derrumbes, mantener vigilancia en escurrimientos que pudieran presentarse en zonas bajas, tener precaución con el riesgo de caída de árboles, tendido eléctrico y espectaculares.
Ante el alto oleaje se exhorta a los prestadores de servicios turísticos a colocar banderolas rojas, retirar mobiliario y equipo del área de playas, así como quitar establecimientos semifijos tipo palapa que estén próximos al mar; a los visitantes y población en general, se les solicita evitar actividades recreativas sobre la franja de arena, no introducirse al mar y atender las indicaciones del personal de Protección Civil, evitar rumores y reportar cualquier incidencia al número 911.
