Árboles caídos, techos tumbados, espectaculares rotos, calles inundadas y mucho caos vial por el cierre de varias calles, sufrieron los vecinos del oriente de la ciudad al pasar una turbonada que bañó ayer en la tarde a la capirucha.
Los fuertes vientos acompañados de mucha agua, fueron los causantes de crear estragos en varias calles de las colonias Amalia Solórzano, Chichén Itzá, Pacabtún, etc., incluso hubo gente que aseguró que cayó granizo.
En la avenida Fidel Velázquez, tres árboles grandes cayeron obstruyendo la vialidad, uno de ellos rompió varios cables, dos transformadores estallaron, dejando sin luz a varias casas del fraccionamiento Fidel Velázquez.
En la escuela Solidaridad también se cayó un árbol y dañó la reja de entrada; el personal de la escuela estaba evaluando los daños.
Chambeadores de la CFE se dieron a la tarea de reparar los daños ocasionados por los fuertes vientos de la turbonada, los habitantes de esas colonias afectadas estaban en las puertas de sus casas viendo cómo quedó la avenida y los árboles derribados.
Adiós tinglado
Carlos May chismeó que el tinglado de su casa tuvo daños. Su hogar se ubica en la calle 55 con 22 del fraccionamiento Fidel Velázquez, ya que un árbol de su vecino cayó sobre éste, derribándolo y obstruyendo la salida a su patio. Según boqueó, ya habían reportado el árbol caído y les dijeron que no podían cortarlo hasta que el dueño lo reporte.
