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La actividad pesquera, pilar de la economía de los puertos de Yucatán, atraviesa por una difícil situación por al menos tres motivos: las bajas capturas, causadas por los malos tiempos y otros factores; las exportaciones de pulpo a países europeos y asiáticos están semisuspendidas y el gobierno no renueva los permisos de pesca.

Se anticipa una catástrofe en la industria pesquera, boqueó Enrique Sánchez Sánchez, presidente de la Asociación Exportamar Yucatán, en entrevista.

El dirigente empresarial pesquero dijo que ya llevaron este asunto al gober Mauricio Vila Dosal y Joaquín Díaz Mena, delegado de Programas Federales.

Se les pidió que gestionen, con voluntad política, que se salgan los permisos de pesca renovados porque, de otra manera, la crisis pesquera estallará pronto, subrayó.

Informó que desde hace varios meses las exportaciones yucatecas de pulpo se fueron al piso porque en los puertos africanos de Mauritania, Marruecos y Catar entre otros, tuvieron buena pesca del molusco e inundaron los mercados de Europa y Asia.

Chismeó que en una temporada pulpera, Yucatán exportaba el 50% de las capturas a Europa y Asia.

Pero, contrastó, de las 35,000 toneladas capturadas en la temporada de 2018 (del 1 de agosto al 15 de diciembre), solo se exportó el 10% porque los clientes europeos y asiáticos compraron el molusco capturado en África, que es de mayor tamaño que el yucateco y también es de menor precio.

Sánchez Sánchez, quien es también presidente de la delegación de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola (Canainpesca), dijo que así como está la situación, mientras los puertos africanos tengan buena pesca de pulpo, se exportará poco molusco boxito y eso es un duro golpe al sector pesquero.

Recordó que en la temporada pulpera pasada hubo buena pesca y también precios altos.

Afirmó que no se puede competir con los africanos, así que aún hay molusco en las congeladoras y también en el mercado nacional, donde la venta es lenta.

Sánchez Sánchez anticipó que debido a que aún hay pulpo en las congeladoras, en la temporada de este año el kilo del molusco se pagaría a entre $60 y $70, a diferencia de la del año pasado, cuando se pagó hasta a $150.

Sobre la cantidad de pulpo que hay en las congeladoras, señaló que no se puede precisar porque la Conapesca no hizo las verificaciones al momento de concluir la temporada en diciembre pasado, pero sí es cierto que hay mucho molusco en las plantas.

Además del desplome de las exportaciones, lentitud en las ventas en el mercado nacional y baja captura de especies de escama, Sánchez Sánchez reveló que hay otro serio problema para el sector pesquero.

2,000 vencidos

Indicó que en Yucatán ya vencieron unos 2,000 permisos de pesca, tanto para lanchas ribereñas como de los barcos, y la Conapesca todavía no los renueva.

La documentación está en poder de la Conapesca, pero el cambio de gobierno federal (que se inició el 1 de diciembre) y de los funcionarios en la Conapesca atoró la renovación de los permisos de pesca, en todo el país hay unos 6,000 (permisos) en espera, abundó.

En el caso de Yucatán, se corre el riesgo de una catástrofe en la industria pesquera porque, si no se entregan a tiempo los permisos de pesca ya renovados, por lo menos unos 10,000 pescadores no podrán salir a pescar escama, pulpo, langosta y pepino.

La captura de langosta, recordó, se inicia el 1 de julio; la pulpeada, el 1 de agosto; la de mero comenzó el 1 de abril y en el caso de pepino de mar no hay período.