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Por conducir, para variar, bajo los efectos del trago, Tomás Itzab Balam, apenas de 25 años de edad, se fue al Valle de los fríos, tras estrellarse con un poste de telefonía mientras rolaba en su caballo de acero.

El chisme ocurrió a las 12:15 de la madrugada, cuando Itzab Balam, bien briago, rolaba en la calle 10 de la carretera Tahdziú-Peto, en la salida de la primera población. El ija perdió el control y se embarró en el poste de madera.

Tras el fuerte camotazo, Tomás perdió la vida al instante, ya que el golpe que recibió en la chola fue tan bestial que tuvo expulsión de masa encefálica.

Por el trancazo, el poste de madera se quebró en tres pedazos, por lo que cuando llegaron los uniformados, no pudieron hacer nada por Tomás, quien ya estaba en el más allá.

Con el ahora occiso iba Isidro Cab Ku, de 24 años, quien fue encontrado en un terreno baldío ubicado a 30 metros del lugar del accidente; estaba inconsciente y con una herida en la chola. Al chaval lo buscaron durante un buen rato hasta que lo hallaron tendido y dado en su máuser.

Los azules no se explican cómo es que este gallo llegó hasta allá, pues desconocen si caminó hasta allá o si cayó en ese sitio por el trancazo que se dieron en la moto.

Los paramédicos de la SSP cayeron en friega al lugar y le dieron los primeros auxilios a Cab Ku, quien fue traslado de urgencia al Hospital de Tekax. Polis estatales y municipales, con personal del Semefo llegaron al sito para su informe correspondiente y el levantamiento del cadáver.

La Policía Municipal fue alertada por un vecino sobre el bestial hecho y de volada se movieron para allá solo para hallar al joven muerto.

Itzab Balam dejó a la orfandad a unos niños, pues estaba casado con Rosalía Yah.

Los uniformados señalaron que es lamentable este tipo de pérdidas humanas, pero esa es la consecuencia de conducir un vehículo motorizado en estado inconveniente.