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La pobre doña María Perla Marisol Aguilar Acosta, de 47años de edad, halló triste final tras sufrir un fuerte guamazo en la cabeza al salir proyectada, luego de impactarse contra la portezuela de una camioneta Jeep Patriot, cuyo conductor abrió sin precaución.

El mortal trancazo ocurrió cerca de las 10:30 de la noche del lunes, en la calle 23 entre 38 y 40 del barrio de San Enrique, en Ticul.

De acuerdo con el chisme policiaco, la motoneta rolaba de Oriente a Poniente rumbo a su cantona en la calle 44 entre 17 y 19 del barrio de San Joaquín.

Al pasar la 23 con 38, el conductor de la camioneta Jeep Patriot, placas URN-222-E, quien fue identificado como Horacio Gonzada López, de 46 años, abrió la puerta izquierda para bajarse sin fijarse que venía la motociclista y esta se estrelló y salió proyectada varios metros.

Tras el guamazo, la damita perdió el casco protector al no tenerlo sujetado y en la caída se llevó un fuerte camotazo en la cabeza lo que le causó la muerte casi instantáneamente.

En ese momento, pasaba Juan Ayuso Ceturión, jefe de la Jurisdicción Sanitaria Número 3, se acercó e intento darle los primeros auxilios a la mujer.

Al ver que no reaccionaba y al ver que sus signos vitales se iban al piso, decidió darle RCP para reanimarla.

En esos momentos hubo angustia y desesperación entre los numerosos curiosos que atrajo el mortal percance.

A los pocos minutos cayeron agentes municipales y al ver la gravedad pidieron el apoyo de paramédicos de la Cruz Roja.

Los socorristas y el funcionario lograron reanimarla, pero en el trayecto al Centro de Salud falleció.

El lugar quedo acordonado y el responsable del accidente fue detenido y remitido a la Fiscalía.

Tres horas después, el Semefo realizó las diligencias del levantamiento del cuerpo. Se averiguo que la fallecida es empleada de una conocida panadería del centro de Ticul.