Fotografia de la Edición Impresa

Unos 50 profes fueron a las instalaciones de la Secretaría de Educación Pública del Gobierno del Estado, para exigir a trabajadores del área de finanzas y recursos humanos el pago correspondiente a once meses de chamba, que hasta la fecha no les ha sido otorgado.

La bronca ha sido heredada por la pasada administración estatal, cuando supuestamente su situación se iba a regularizar y mejorar, pero todo terminó siendo peor.

Pasadas las diez de la mañana, llegaron a las instalaciones de Segey ubicadas a espaldas del Hospital Juárez para solicitar que sus demandas sean atendidas. Recalcaron que necesitan una pronta resolución pues no pueden seguir sin cobrar. Ya molestos, dijeron que por la falta de varo, muchos ya se endeudaron.

Una de las docentes se encuentra embarazada y externó que está a punto de solicitar la incapacidad, que por derecho le debe ser otorgada, y aún no recibe su sueldo. “No es justo, ya casi nace aquí mi hijo” señaló angustiada. Pasaron varias horas y aunque fueron llegando diferentes representantes del área financiera de la Secretaría de Educación, entre ellos Javier Eduardo Cámara, director de administración y finanzas, ninguno les pudo fijar una fecha de pago.

Lo que les ofrecieron fue un préstamo, mediante firma, para que posteriormente en caso de llegar el pago federal hagan la consecuente devolución. Esta propuesta calentó más a los profes, quiene sno se mostraron de acuerdo y consideran que se trata de una burla. “Pues les quieren prestar dinero sobre su propio sueldo, solo pedimos que se nos pague los justamente trabajado y que dejen de engañarnos con probables fechas”. Hubo dimes y diretes, algunos profesores alzaron la voz, desesperados y enojados plantearon como último recurso que les extiendan un documento por escrito en el que se comprometen a atender su caso y a solucionarlo a más tardar el 15 de agosto, fecha en la que supuestamente algunos docentes que están en una lista recibirían el pago. La preocupación es mayor porque hay muchos de ellos que no aparecen en esa lista y no entienden por qué, y nadie les puede dar una razón coherente.