A.A.E.P. y N.A.G.B. vivieron una odisea en días pasados, cuando estuvieron a punto de perder a su bebé recién nacido, por una presunta negligencia médica de trabajadores del Hospital Comunitario Peto, cuyo caso ya obra en denuncia penal en la Fiscalía General del Estado.

La joven familia paró en un hospital particular de Oxkutzcab donde tuvieron a su bebé, el pequeño M.E.G. el cual tenía pocas esperanzas de vida por la falta de atención y supuesta irresponsabilidad de los médicos y enfermeros del materno de Peto.

N.A.G.B. relató los momentos de desesperación que vivió el sábado pasado horas antes de dar a luz. Explica que el jueves de la semana pasada acudió al Hospital General de esta ciudad donde le dieron los papeles para que acuda al Comunitario de Peto porque estaba a horas de dar a luz.

“Desde ese día los médicos me dijeron que ya se había pasado el tiempo de mi embarazo y tenía 3 de dilatación. Acudimos al hospital de Peto y desde que llegamos nos dimos cuenta de que no se nos prestaba atención”.

“Sólo me tocaron físicamente y dedujeron que todavía faltaba para que mi bebé naciera. Así estuve esperando, hasta el sábado, confiando en que ellos sabían su trabajo, entonces ese día yo ya no soportaba los síntomas, uno de los enfermeros que era calvo y de barba larga, se burló de mi diciendo que si ya había aguantado tres días podía aguantar otros tres”.

“Uno de los médicos vino y me dijo tenía que esperar. Le pedí que me hagan estudios y se negaron, ya no soporté y así sintiéndome cada vez peor nos dirigimos a una clínica particular de Oxkutzcab”.

“Al llegar los médicos leyeron mi expediente y de inmediato me dijeron que había anomalías. Me practicaron un ultrasonido y se dieron cuenta que el corazón del bebé estaba dejando de latir, que llevaba días sin líquido amniótico, y que yo podría presentar una hemorragia”.

“De inmediato me practicaron una cesárea y nos hicieron firmar papeles porque se trataba de un caso de alto riesgo, que el bebé podría presentar problemas, incluso podría fallecer. Me operaron y detectaron que el bebé habría ingerido meconio (primeras heces), que estaba mal porque se había pasado de tiempo en nacer y le tuvieron que practicar un lavado de estómago”.

“Tras varias horas de desesperación, todo salió bien, pero no podemos dejar pasar los abusos y falta de atención de los médicos del hospital de Peto. Estuve a punto de perder a mi bebé y mi vida también estuvo en riesgo de infección”.

La familia que vive en La Ermita, acudió ayer a interponer la demanda penal con las pruebas de la falta de atención y presunta negligencia médica de los trabajadores del Hospital Comunitario y esperan justicia.