Mi adorada tía, me han roto el corazón. El chavo que me latía me mandó a volar porque estoy gordita. Le confesé mi amor y hasta se rió de mi. Ahora me siento fea, y que nadie nunca va a quererme. Me da pena decirle a mi mamá.

Elvira Canché

Mi hermosa sobrina, no dejes que un chavo todo baboso y meco te haga sentir mal contigo misma. Mi reina, el tener unos kilitos extras no te hacen una muchacha fea. Mira a tu tía, que está bien gordibuena y le llueven los galanes. ¡Ánimo, guapísima! Habla con tu mami