Un sujeto, a quien identificaron como Stephen Waterson, aplastó a un bebé hasta matarlo y la madre del menor, su pareja, lo defendió.

Alfie Lamb, la víctima, estaba al interior del auto con el sujeto y su madre cuando ellos consideraron darle una lección.

Según la pareja el niño estaba muy inquieto por lo que Waterson decidió aplastarlo con el asiento delantero del auto en el que él iba sentado.

El pequeño Alfie murió tras sufrir un paro cardiaco después de quedarse sin aire. La mujer, Adrian Hoare, mintió ante la policía para defender a Waterson y dijo que el bebé murió tras abordar un taxi.