#DINAMARCA  una enfermera de 36 años confesó ante el tribunal que sacaba  medio litro de sangre semana a su hijo.

Debido a este el tribunal condeno a la mujer a pasar 4años de prisión por poner en peligro la vida de su hijo, a quien desde los  5 años comenzó a ser ordeñado.

La madre confeso que era  no consiente en lo que hacía, los expertos en psiquiatría dijeron que padecía  “síndrome de Münchhausen” el cual consiste en buscar síntomas reales o hacer daño para que el menor parezca enfermo.