Buenos Aires, Argentina.- Un padre bienmaloso de Buenos Aires, Argentina, decidió castigar a su morrito de forma cruel.

El padre castigó al chiquito de apenas tres años porque le robó “money” de su cartera y se lo gastó en dulces y el padre lo encerró en el refrigerador durante tres horas.

Cuando su madre llegó de la chamba, escuchó un llanto en el electrodoméstico y fue entonces cuando lo sacó de ahí. 

Tras conocer el motivo por el que fue castigado, la mujer enfrentó a su marido y este trató de agredirla, por lo que decidió denunciarlo.