Imagen ilustrativa

Estados Unidos- Una pareja hizo justicia por su propia mano, sobre el abuso sexual de una niña, apuñalaron a los agresores y dejaron los restos remojados en ácido.


Augustus “S” y
Tiffany “P”.

Tiffany “P” y Augustus “S”, llegaron a la casa de los agresores, un chavo de 24 años y una chavita de 15, a quienes atacaron y apuñalaron sin piedad, pues era la venganza por haber violado a una pequeña; aunque no había prueba de ello.

Vecinos escucharon los gritos y llamaron a la policía, pero cuando llegó la tira sólo estaban los restos, descuartizados y remojados en una cubeta de ácido.

Los agresores fueron detenidos, pidieron perdón frente a los jueces y familiares, pero recibieron cadena perpetua.