En Octubre del año de 1972, alrededor de 1900 habitantes de Saltillo, Coahuila viajaban de regreso a su tierra después de haber ido a visitar a San Francisco de Asís en Real de Catorce, cuando de pronto el tren donde viajaban tuvo un fatal accidente, el cual pondría de luto a todos los mexicanos.
Las pasajeros que aún seguían con vida, suplicaban con gritos de dolor por ayuda mientras estaban atascados entre los fierros y cadáveres, los coahuilenses de Saltillo hicieron una labor de días para el rescate de los cuerpos, aunque no se sabe exactamente la cantidad de muertes, se sabe que fueron cientos los que perdieron la vida en el tren, se dice que hubo cuerpos que nunca se encontraron por lo que da origen a la teoría de que bajo esas vías, siguen algunos cuerpos enterrados.
Lamentablemente muchas de las almas que murieron se quedaron atrapadas en el puente moreno, lugar exacto donde ocurrió el accidente, condenadas a vivir en las vías del tren que les truncó la vida. Los lugareños cuentan que por las madrugadas se pueden escuchar los lamentos de seres que no podemos ver, y en ocasiones a lo lejos de la oscuridad emanan unas luces como si pertenecieran a un tren que viaja por las vías, y se puede escuchar el sonido peculiar del tren cuando avisa su llegada. En las casas de los alrededores se pueden ver sombras que traspasan las paredes y murmuran entre si, la mayoría de las veces parecen voces de niños.
Quienes han sido testigos de estas manifestaciones paranormales, aseguran que los espíritus mas traviesos son los niños, pues disfrutan de asustar a las personas, en una ocasión un velador que pasaba por el lugar, vio a un niño llorando que esperaba que su madre fuera por el, el niño mencionó que había estado esperando por mucho tiempo, al llamar el hombre a las autoridades, le comentaron que el último tren qué pasó fue hace muchos años, cuando el hombre volteo a ver el niño, el comenzó a reír mientras su figura desaparecía.
Un señor de alrededor de unos 80 años recuerda con melancolía ese accidente, menciona que fue el peor viaje de su vida, y por otro lado el mejor… Pues fue el último viaje que tuvo a toda su familia reunida.
