Don Gílmer Campos palma, es un señor de 86 años que vive en Dzilám González, y todas las mañanas sale en su motoneta para hacer acrobacias y deleitar a los pequeños que se dirigen a la escuela cercana al Palacio Municipal.
Los niños siempre los miran con alegría y roba el cariño y los aplausos de quienes por ahí transitan. A sus más de 80 años don Gil se siente fuerte, comenta que no padece ninguna enfermedad y que le encanta distraer a los niños por un momento con sus piruetas.
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Además de su hobby, el señor Campos trabaja en el transporte, anota en una libreta a los pasajeros que abordan los taxis que se dirigen a Mérida, Dzidzantún o Dzilam de Bravo.
Los habitantes del lugar mencionan que es alguien muy amable y honesto, que se ha ganado la admiración de la gente.
“Estoy contento y agradecido con Dios todo poderoso. A pesar que ya tengo edad, me gusta mi trabajo, me gusta llamar la atención de la gente (que viaja), tengo cuatro años trabajando en la plaza principal en esto de anotar gente para que aborden los taxis” expresó don Gílmer.
