Carlos Pedrero, originario de Villahermosa, Tabasco; salió hace 48 días de la Ciudad de México a bordo de su bicicleta.

Recorriendo más de 2500 kilómetros a bordo de su bicicleta y acompañado de su pequeño gran amigo “Chac Mool” un perrito schnauzer lleno de energía.

Carlos salió de la capital del país, con una crisis existencialista, sentía que la vida se le escurría y necesitaba hacer algo.

Decidió viajar rodando  y visitar amigos y familia en Tabasco, en Campeche y llegar a conocer Mérida.

Llegó hace un par de días y se siente inmensamente complacido.

Porque durante todo su trayecto ese vacío existencial se convirtió en un corazón lleno de alegría y de energía renovada.

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Gracias a los amigos que ha conocido en el camino y por la inigualable experiencia de hacer tanta introspección mientras rodó durante tantos kilómetros.

Hoy recomienda a todos, hacer lo que puedan, lo que quieran con lo que tengan. Lo importante es dar el primer paso.

“Chac” lo ha pasado de lo mejor  junto a su humano.

Este perrito ha gozado más que nadie de este recorrido en bicicleta  a través de la República Mexicana.