En el olvido y en muy malas condiciones es como se encuentra Felipe Neri Canul, un viejito de 88 años de edad, originario de Tizimín y que por la situación en la que se encuentra necesita ayuda.

El abuelito al parecer vive solo, pues nadie vela por él, ni su familia, en ocasiones los vecinos son quienes le brindan apoyo, despensa o comida, pero la ayuda no es constante, ya que las personas que viven a su alrededor también carecen de recursos económicos.

Felipe no tuvo esposa, ni hijos, siempre fue soltero y trabajador, según cuentan los vecinos.

Hasta hace algunos años se dedicaba a curar el mal de ojo y daba masajes en la espalda, era hierbatero, pero con el paso de los años ya no pudo seguir ese oficio, pues sus condiciones físicas se lo impedían.

A través de redes sociales se ha difundido el caso de este octagenario, quien habita en el domicilio # 455 de la calle 60B con 63 y 63 B de la Colonia San Francisco, en Tizimín.

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Fue la Fundación “Wayak Ek” quienes pusieron los ojos en don Felipe para ayudarlo.

Luis Adolfo Aké Pérez presidente de esa agrupación altruista independiente invitó a los lectores a aportar su granito de arena, ya que la situación en la que se encuentra el anciano es precaria.

Por ello pide la ayuda de la ciudadanía para apoyar con despensa, ropa, comida y hasta dinero, pues el señor de avanzada edad en ocasiones pasa hasta dos días sin comer.

Aké Pérez dijo que todos aquellos interesados en aportar su granito de arena lo pueden hacer comunicándose al teléfono 9865932243.- MEGAMEDIA