“El Gobierno de España lamenta profundamente que se haya hecho pública la carta que el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos dirigió a su majestad el Rey el pasado 1 de marzo, cuyo contenido rechazamos con toda firmeza”, detalla el documento del gobierno encabezado por Pedro Sánchez.

En el comunicado, el gobierno español detalla que “la llegada hace quinientos años de los españoles a las actuales tierras mexicanas no puede juzgarse a la luz de consideraciones contemporáneas”.

“Nuestros pueblos hermanos han sabido siempre leer nuestro pasado compartido sin ira y con una perspectiva constructiva, como pueblos libres con una herencia común y una proyección extraordinaria”, argumenta en la respuesta.

El gobierno español reiteró su disposición “para trabajar conjuntamente con el Gobierno de México y continuar construyendo el marco apropiado para intensificar las relaciones de amistad y cooperación existentes” entre los países que “permita afrontar con una visión compartida los retos futuros”.

Desde la zona arqueológica de Comalcalco, en Tabasco, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó, a través de un video, que envió una carta tanto al rey de España como al papa para que se realice un relato de agravios y se pida perdón a los pueblos originarios por las violaciones a lo que ahora se conoce como derechos humanos.