EL EGIPCIO Mohamed Salah celebra el cuarto gol del Liverpool, ayer

En un duelo tan enloquecido como emocionante, Liverpool se encargó de ponerle fin a la racha de 22 victorias consecutivas que ostentaba el Manchester City en la Liga Premier inglesa, al imponerse ayer, 4-3.

El City tropezó al fin, en una cancha que le ha deparado muchas decepciones a lo largo de la historia. Ha cosechado en Anfield apenas un triunfo durante los últimos 37 años en la Premier.

Liverpool anotó tres veces en nueve minutos de locura.

Con el marcador igualado 1-1, Roberto Firmino picó el balón ante la salida del arquero Ederson Moraes para que los “Reds” recuperaran la delantera a los 59 minutos. Sadio Mané envió a las redes un potente disparo a los 61 y el egipcio Mohamed Salah aprovechó un mal despeje de Ederson para definir de larga distancia a los 68’.

Las tres dianas se derivaron de errores por parte de lo que era la mejor defensiva de la liga. El City simplemente no pudo contra la intensa presión ejercida por los locales, comandados por el incontenible Firmino.

“Éste fue un partido histórico, del que se seguirá hablando en 20 años, porque parecía que el City no perdería en todo el año”, recalcó Jurgen Klopp, el estratega del Liverpool. “La gente miró este partido en todo el mundo, y ha sido por eso, porque hemos dado el corazón en la cancha y hemos jugado así”.

Man City amenazó con lo que hubiera sido una remontada increíble, tras los goles de Bernardo Silva a los 84 minutos e Ilkay Gundogan en los descuentos.

Pero Liverpool supo resistir al desenlace.

Liverpool se colocó en el tercer puesto con 47 puntos, debajo del Manchester United y encima del Chelsea, en ambos casos por diferencia de goles. Pese al tropiezo, el City ostenta todavía una amplia ventaja, con 62 unidades.

Horas antes, sin su astro, el chileno Alexis Sánchez, el Arsenal desperdició la delantera y recibió dos goles en cinco minutos para caer por 2-1 en su visita al Bournemouth.