Arturo Brizio, presidente de la Comisión de Árbitros, y Beatriz Ramos, directora de Comunicación de la FMF, confirmaron que las medidas para erradicar el grito homofóbico en los estadios entrarán en vigor a partir de la Fecha 14 que arranca mañana en Puebla. “Esto es la respuesta a una emergencia, estamos en gran problema que de seguir, podría afectar a la Selección Mexicana perdiendo puntos o hasta costándole un Mundial, en el caso de los clubes podría costarles hasta perder la categoría“, reveló en conferencia de prensa. En ese sentido, Arturo Brizio reafirmó el protocolo que será implementado, con la intención de concientizar a los aficionados. “Si se escucha el grito, el árbitro deberá hacer una señal para que el sonido local invite a los aficionados a detenerse, mientras que la seguridad del inmueble deberá identificarlos y retirarlos. Si hay reincidencia, el árbitro detendrá el partido por dos minutos. Por último, en caso de que haya una nueva reincidencia, el silbante parará el partido por cinco minutos y los jugadores regresarán al vestidor“, explicó.
“Por medidas de seguridad, el partido en curso no será suspendido pero el árbitro emitirá un informe de lo ocurrido, lo cual dará paso para que el próximo partido de dicho estadio se juegue a puerta cerrada”, finalizó.
