David Allen Turpin y y Louise Anna Turpin fueron acusados de torturar y mantener en cautiverio a sus 13 hijos en Perris, California, por lo que podrían pasar de 94 años hasta de por vida en prisión.
Enfrentan una fianza de $13 millones de dolares cada uno con 12 cargos de tortura, 12 cargos de cautiverio, seis cargos de abuso infantil y negligencia. El padre también enfrenta un cargo de actos lascivos contra un menor de 14 años.
El caso salió a luz el pasado domingo cuando una chamaca de 17 años consiguió escapar y llamó a las autoridades para chismear que ella y sus 12 hermanos estaban secuestrados por sus padres. La morrita había planeado su escape durante 2 años.
El abuso de los hijos de edades entre 2 y 29 años habría empezado desde el 2010 y poco a poco había subido de tono.
- La familia pasaba toda la noche despiertos y dormían todo el día.
- Los padres empezaron a amarrar a sus hijos con cuerdas, y cuando uno logró supuestamente escapar, comenzaron a usar cadenas y candados.
- Durante estos castigos, no se les permitía ir al baño.
- Los padres tampoco permitían que sus hijos se bañaran más de una vez por año.
- Los castigos también incluían golpizas y estrangulamientos. Eran por cosas tan pequeñas como porque los niños se lavaran las manos arriba de la muñeca
- Apesar que los padres compraban alimentos, no alimentaban a sus hijos quienes sufren de una fuerte desnutrición.
- Tampoco les permitían jugar con juguetes, aunque en la casa había numerosos todavía en sus envoltorios.
- Varios de los chamacos no sabían lo que era un policía, ni un medicamento.
- Algunos no han visto a un doctor en cuatro años y ninguna de las víctimas algunas vez ha visto a un dentista.
- Lo único que se les permitía hacer en sus cuartos era escribir en diarios que ahora sirven para saber más sobre el caso