Su hija, fue la encargada de reconocer el cuerpo en pleno camino, en calles de Telchac pueblo; comentó que padecía de cirrosis hepática, pero no había poder humano que lo alejara del trago.
El pasado lunes en Telchac pueblo, Miguel Iuit iba por un camino que acostumbra a transitar, cuando de pronto vio un cuerpo ahí tirado. Primero pensó que estaba borracho, pero luego observó bien y no respiraba.
Se trata de quien en vida respondiera al nombre de José del Carmen Aké, tenía 56 años y lo conocían en el pueblo, pues diario agarraba el chupe, y se ponía borrachin.
Su hija María del Carmen, fue quien tuvo el infortunio de reconocer el cuerpo de su padre, de quien comentó en la mañana se encontraba muy bien. Salió como casi a diario, a buscar con qué saciar su sed de la mala. A pesar de saber que lo tenía prohibido por su cirrosis hepática.
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Los hechos ocurrieron en un camino de la calle 18 por 9A, rumbo al fraccionamiento conocido como “Henequeneros”. Los lugareños comentaron que en ocasiones por la cirrosis hepática, se le veía en las calles con la barriga inflada, luego lo ingresaba al Seguro Social para su tratamiento, pero apenas quedaba bien volvía a las andadas.
La Policía Municipal llegó al sitio, y aunque desconocen las causas oficiales del fallecimiento, no tenía huellas visibles de golpes o violencia. Todo parece indicar que fue un infarto fulminante.
Al lugar también llegó una ambulancia de traslado y un paramédico fue el encargado de confirmar la muerte de esta persona.
Elementos de la policía municipal aseguraron el área en espera del personal de SEMEFO para llevar a cabo los procesos de ley.
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