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En un hecho sin precedente en Yucatán, un agente de la Policía Estatal Investigadora (PEI), asignado a la Unidad Antisecuestros, fue ejecutado de un tiro en la cabeza.

Otro de sus compañeros se encuentra en estado crítico en el hospital, ya que también recibió un impacto de bala en el rostro. El crimen sucedió en la calle lateral de Periférico que desemboca en el estacionamiento de la Fiscalía, en el Complejo de Seguridad, la zona más segura de Yucatán.

El hecho causó conmoción entre decenas de agentes de la SSP, así como en personal de la Fiscalía, quienes dejaron sus funciones por unos instantes para acercarse al lugar de los hechos. Se podía percibir un ambiente de tristeza, con el rostro desencajado por la pérdida de su compañero. Algunos no aguntaron y rompieron en llanto. Las expresiones eran, que era un buen amigo y que no merecía ese triste final. Otros que era un buen policía y excelente compañero. El crimen ocurrió poco después de las 7 de la mañana de ayer. El agente viajaba junto con otro de sus compañeros y una pareja originaria de Cancún, Quintana Roo, a quien le darían protección, en un auto Versa vehículo que les habían asignado para sus tareas, transitaban de Oriente a Poniente rumbo a la Fiscalía. La idea era llevarlos al edificio de la dependencia, para ponerlos seguros luego de una amenaza de secuestro. A menos de 100 metros de llegar al edificio de la corporación un hombre, presunto empresario, sacó un arma del bolso de su mujer, y la accionó contra el agente y su compañero. El Policía murió al instante, mientras que su compañero quedó gravemente herido. El auto quedó sin control por lo cual se salió de la carretera por su costado izquierdo y se Impactó de frente contra un registro de energía eléctrica y un poste de la CFE.

Por el golpe el auto giró y quedó mirando hacia el Poniente. El hecho fue presenciado desde Umipol, a través de las cámaras de seguridad por lo cual en menos de dos minutos arribaron decenas de policías, quienes detuvieron al presunto asesino y su pareja.

Se aseguró el arma y se pidió a los servicios de emergencia. Paramédicos de la SSP, certificaron la muerte del policía y trasladaron al hospital al otro agente herido. Asimismo pusieron bajo custodia a los causantes. Cerca de 50 personas entre peritos, criminalistas y agentes de homicidios, realizaron durante cerca de seis horas. Se recuperaron tres casquillos, de igual número de disparos y se incautó el arma homicida. En un comunicado oficial, se indicó que presunto homicida, de quien no dieron nombre, había solicitado el auxilio de la Policía de Yucatán para él, su esposa y sus hijos, porque en el estado de Quintana Roo, de donde son originarios, un familiar fue víctima de un secuestro y temían por su integridad.

Los elementos de la SSP respondieron a la petición de ayuda y cuando la familia era traslada en dos vehículos a la Unidad Especializada de Combate al Secuestro de la FGE, por motivos que se desconocen el presunto agresor sacó un arma del bolso de su esposa y disparó, matando a un policía e hiriendo a otro en el rostro. Trascendió, sin ser confirmado de manera oficial, que falló el protocolo para estos casos debido a que no se verificó si los solicitantes del auxilio portaban algún tipo de arma. Se espera que el oficial “caído” sea sepultado con honores en el mausoleo de la Secretaría ubicado en el Cementerio de Xoclán, debido a que murió cumpliendo con su deber. Esta es la primera ocasión que ocurre un hecho bajo estas circunstancias en la historia de Yucatán.