Esta tarde un joven con problemas de obesidad estuvo encerrado en el auto de su padre, el cual estacionó en el Parque del Barrio de Santiago.

Agentes de la Secretaría Pública y de la Policía Municipal auxiliaron al joven, quien tuvo una crisis nerviosa por el calor que lo estaba sofocando.

A pesar de que los agentes intentaron ayudar al joven, este dijo que no ya que no puede caminar por su obesidad.

Debido a la situación los agentes le compraron agua y suero para que bebiera y colocaron tapetes en el cristal para que el sol no le pegue de forma directa.

El reporte fue levantado por personas que se encontraban en el mercado de Santiago.

El padre apareció después de casi media hora, alegando que se había ido con el “comandante Romero” a revisar unas cámaras por un delito del que fue víctima.