José Isabel Peraza, de 24 años de edad, falleció ayer en la aguada de Mulchechén cuando nadaba junto con otras personas.
Los hechos ocurrieron cuando dos parejas y dos menores de edad entraron en los terrenos donde funcionó un banco de materiales del Gobierno del Estado para construir carreteras, pero que estaba cercado con alambre de púas.
Vecinos del municipio de Kanasín que acudieron de pasadía para refrescarse del calor, escucharon algunos gritos a la 1 de la tarde.
Al acudir, señalaron que dos mujeres, un hombre y dos niños mostraban hacia el agua gritando que alguien se estaba ahogando.
La profundidad de la aguada se estima entre cinco y siete metros, de modo que llamaron a los cuerpos de emergencia.
Al llegar elementos de rescate, vecinos intentaron lanzarse al agua, pero policías de Kanasín lo evitaron. Una vez que constataron los hechos los agentes del municipio avisaron a su base, al sitio llegaron otras unidades de rescate, pero ya nada pudieron hacer.
Los agentes llamaron a buzos de la SSP, en espera del Servicio Médico Forense para el levantamiento del cuerpo, cuyo rescate se realizó en la oscuridad total. Según versiones, al sujeto de 24 años de edad le dio un calambre y se ahogó, aunque otras versiones señalan que fue succionado por el agua al llegar al centro de la aguada, otra versión fue que estaba ebrio y no sabía nadar.
