El dirigente de los albañiles en la CTM dice que en este año continuará la buena racha

Al concluir el primer mes del año, la industria de la construcción de Yucatán no resintió la crisis laboral ni económica, ni la política de austeridad gubernamental porque hay suficiente obra privada en Mérida.

El secretario general del sindicato de alarifes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Bernabé Chan Castañeda, informó que afortunadamente Mérida y Yucatán siguen atrayendo inversiones privadas y por ello no les afecta que a estas fechas no empiecen los programas de obra pública de los gobiernos federal, estatal y municipal.

Pero, señaló, tiene noticias de que algunos gobiernos ya licitaron algunas obras y en unas semanas más arrancarán los proyectos.

El líder de los albañiles pronosticó que en este año continuará la buena racha de obras públicas y privadas, lo que significa que los trabajadores y la industria de la construcción tendrán otro buen año.

Sin detenerse

Chan Castañeda aseguró que la industria de la construcción no se ha detenido desde el año pasado, continúan las obras privadas que están en proceso, reanudaron algunas que se detuvieron por cuestiones financieras o de permisos, y están iniciando otras nuevas.

“Ya reanudaron sus trabajos hoteles como el Xixim de la Colón (hotel boutique Wayam by Xixim, que se inició en enero de 2017), el Marriott (Marriott Courtyard, de 140 habitaciones que estará en la esquina de la calle 62 con Avenida Colón, frente al Centro Internacional de Congresos) y continúa el de Prolongación Paseo de Montejo (Plaza MID Center, donde estará el hotel Fiesta Inn Exprés de 144 habitaciones)”, señaló.

“También hay obra nueva, está empezando una escuela privada en un terreno grande donde funcionó una calera hace años. Hay trabajo por la obra privada que no se ha detenido, al contrario llegan más por la buena situación de Mérida”, dijo.

En el terreno de la excalera y producción de material de construcción San Benito están en proceso de edificación las instalaciones donde funcionará el Instituto de Ciencias y Estudios Superiores de Tamaulipas, llamada por los albañiles como la universidad privada de Tamaulipas.

Ese terreno era un terreno baldío que servía de refugio para los malvivientes y que generaba incendios por los arbustos secos.

Está a la orilla de la Avenida Hidalgo entre 40 y 48 de la colonia Roma.