La que no perdonó fue La Muerte, pues sorprendió a don Luis Humberto Mis Aké, de 63 años, mientras chambeaba duro y tupido para ganarse el pan en su tricitaxi en calles de Halachó.

Los hechos ocurrieron poco después de la 10 de la mañana en la calle 13 con 24: al hombre se le paró, pero el corazón mientras trabajaba, quedando su cuerpo inerte en el vehículo ligero.

Personas que pasaban por ahí le contaron el chisme a la Policía Municipal, pues les pareció extraña la posición en la que se encontraba el tricitaxista.

Al lugar acudieron agentes y paramédicos de la Policía Municipal Coordinada, que constataron que el hombre se encontraba muerto.

Fue la esposa del ahora fallecido quien reconoció el cuerpo sin vida del pobre don Luis ante las autoridades.

La mujer dijo que el ija era hipertenso y también padecía diabetes. La última que vez que lo vio con vida fue a las 7 de la mañana del sábado, cuando salió a trabajar.

Posteriormente, de acuerdo con los dictámenes determinó que la causa de muerte fue infarto fulminante.