Un buen susto se llevaron los vecinos y el dueño de una cocina económica ubicada en la calle 67 entre 42 y 44 de la unidad habitacional Cordemex, cuando se le rompió la válvula a un tanque de gas mientras la estufa estaba encendida.
Lo anterior provocó un incendio y generó el temor de una explosión. “Era como un soplete gigante”, afirmó el dueño del negocio, quien agregó que estaba cocinando cuando de pronto sintió el flamazo. Como pudo se acercó al tanque y lo acostó, pero de plano no se apagaba: “me quemé las cejas y parte del cabello”, indicó.
A unas dos cuadras hay una caseta policíaca, hasta donde fue a pedir ayuca, en cuestión de minutos el lugar se llenó de policías y bomberos.
“Los bomberos estaba enfriando, pero la llama no cedía”, explicó el dueño.
Al final, los “tragahumo” lograron controlar el incendio y prevenir la explosión; lo único malo fue que el dueño se medio chamuscó y que varios clientes se quedaron con hambre, pues el lugar ya no trabajó por ese día.
Los bomberos determinaron que el tanque, de 30 kilos, sufrió el desperfecto en la válvula debido a lo deteriorado que se encontraba.
