Con el entierro de Juan Carnaval, anoche en los bajos del Palacio municipal, culminó una semana de jolgorio en el que la gente bailó con las comparsas, cantó con Chayanne y Moderatto, y admiró a Maribel Guardia, Lorena Herrera y Yahir, entre otras figuras de la tele.
El entierro del popular personaje, que marcó el fin del Carnaval 2020 de Mérida, convocó a decenas de deudos que desde temprano ocuparon sus lugares bajo los portales del ayuntamiento (debido a la llovizna) para llorar… pero de risa.
Allí estuvieron las seis parejas reales, de riguroso negro, encabezando el cortejo, aunque antes disfrutaron de un sketch protagonizado por Cuxum, Wilma, Chayak, Balita, Ranfla y Cocotazo, personajes de la compañía de Erik Ávila.
La representación del funeral estuvo a cargo de la compañía de Érick Ávila “Cuxum” y de la que forma parte el rey feo Isaac Alonzo Puerto “Isaac I”, quien vistió de saco y corbata negra en señal de luto. La reina Paola I, igual de negro con un vestido largo similar al de Morticia Adams.
Por supuesto no faltaron los demás reyes: Alexia y Joshua (juveniles), Fayne y Benjamín (infantiles), Magdalena y Torito (de la tercera edad), Cynthia Paola y Chucho (de la discapacidad motriz) y Cinthia Larissa y Chema (de la discapacidad intelectual).
Todos tristes, todos compungidos, todos con caras largas, pues el entierro de Juan Carnaval marcó también el fin de sus reinados. Pero luego esas caras cambiaron y se tornaron alegres cuando se dio la lectura del testamento.
Cuxum tuvo a su cargo la lectura del documento en el que quedó asentado que a los reyes Isaac y Paola les dejó, aprovechando que es Miércoles de Ceniza, una lata por haber mostrado tanta carne. Los demás soberanos también recibieron parte de la herencia y hasta a los del al Comité Permanente del Carnaval de Mérida, les tocó hueso.
