El Manchester United adquirió al chileno Alexis Sánchez del Arsenal ayer, en un inusual intercambio pues envió al mediocampista armenio Henrikh Mkhitaryan al club londinense.
“Cuando había la opción de venir para acá, ahora, miré el escudo y se me ponían los pelos de punta porque es un club potente y el más grande de Inglaterra”, declaró Sánchez, exjugador del Barcelona.
El acuerdo por los jugadores de 29 años fue anunciado de manera simultánea por ambos equipos de la Liga Premier, y el técnico del Arsenal, Arsene Wenger, enfatizó que Mkhitaryan es un “futbolista muy completo”. “Es un sueño hecho realidad”, dijo por su parte Mkhitaryan, “porque siempre he soñado con jugar para el Arsenal”.
Los detalles económicos del trato no fueron revelados, pero el United indicó que Mkhitaryan se sumaba como “parte del acuerdo” para llevar a Sánchez a Old Trafford.
La adquisición de Sánchez es considerada una verdadera declaración del United, como la llegada de Eric Cantona en 1992 y de Robin van Persie —que también se incorporó procedente del Arsenal— en 2012. Al ganarle al City la contratación del atacante chileno hará su llegada mucho más agradable para los aficionados del United y para su técnico José Mourinho.
