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Las activistas Gina Villagómez Valdés, Adelaida Salas Salazar, Nancy Walker Olvera, Bertha Elena Munguía Gil y Ligia Vera Gamboa señalaron que hoy viernes, mientras los derechos de las mujeres sigan siendo violentados, no hay motivo alguno para celebrar.

“Las mujeres en Yucatán están en peligro en la calle y también en la casa, y si no se destina presupuesto ni se capacita a la Policía Estatal al rato nos irá peor”, dijo Adelaida Salas, en rueda de prensa que ofrecieron para dar a conocer su postura sobre diversos temas relacionados con la mujer y violencia de género.

“Por eso no celebramos el 8  de marzo, pues mientras nuestros derechos sigan siendo violentados y vulnerados seguiremos alzando la voz cada 8 de marzo”, indicó la doctora Ligia Vera.

La doctora Gina Villagómez recordó que el 8 de marzo es la conmemoración de la lucha por los derechos de las mujeres y no un día para recibir felicitaciones por ser mujeres. “Es la conmemoración de este proceso que lleva, al menos en Yucatán, más de 100 años desde que las primeras mujeres en el Congreso Feminista levantaron la voz por mejores condiciones laborales, el derecho a decir cuántos hijos tener, el derecho al divorcio y otras luchas más”.

La doctora  recordó que en mayo de 2017 se aprobó la Ley estatal de Paridad, la cual estableció que los partidos políticos deberían asignar sus candidaturas en porcentajes iguales para hombres y mujeres.

Sin embargo, lamentó que de los 25 municipios más importantes de Yucatán (los que tienen mayor población y recursos) en el 80% se puso a hombres como candidatos y al final solo una mujer quedó a cargo.

La doctora añadió que la violencia que han recibido las mujeres ha sido dentro de sus propios partidos, dejándolas más debilitadas, dolidas y lastimadas como para volver a participar en un proceso electoral.

“La primera violencia que encontramos en la política es la violencia interinstitucional partidista en contra de sus propias mujeres, y el silencio cómplice de mujeres con poder dentro de los partidos que no inician una lucha a favor de las mujeres que quieren acceder a la participación”.

Las activistas también se refirieron al tema de los refugios para mujeres los cuales  seguirán recibiendo recursos federales, después de haberse anunciado la semana pasada que se les retiraría el apoyo.

“Los refugios para nosotras son  la única alternativa que tienen las mujeres para huir de la violencia, teniendo un lugar seguro donde se les atienda en todos los sentidos, y pensamos que sería un error garrafal quitar eso como una política pública. Es un tema de preocupación que se acaben estos refugios”, expresó Nancy Walker. En el país hay 70 espacios, señalaron. De éstos dos están en Yucatán (más el de la Fiscalía, que es de carácter transitorio donde solo pueden estar 72 horas).

“Que haya 70 espacios ya dice mucho”, indicó la activista. “Cuando hablamos de un refugio las personas no tienen contacto con nadie ni vía telefónica ni vía internet, ni los niños  van a las escuelas. Estamos hablando de casos sumamente alarmantes y por eso decirles ‘gracias por participar, ya no hay recursos’ es poner en muchísimo riesgo a las mujeres”.