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Un celular de poco más de $20,000 que cayó en un pozo pluvial derivó en la movilización de chambeadores municipales que rompieron una acera y dejaron casi 12 horas un hueco cuando se les ordenó cancelar “el rescate” del costoso teléfono.

El peculiar caso ocurrió el sábado 22 cerca de las 10:40 de la noche en Motul.

Terminada la sesión solemne de Cabildo el aniversario 148 de la ciudad, Rodrigo Manuel Díaz Montero, regidor del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), fue a su vehículo Kia negro placas ZBT-633-A, acompañado de su esposa, quien está embarazada.

Pero al subir al auto, a la mujer se le cayó el celular iPhone y, para su mala suerte, ingresó por una abertura al pozo construido hace unos 35 años aproximadamente.

Díaz Montero solicitó al alcalde, el priista Roger Aguilar Arroyo, apoyo para recuperar el celular e indicó que era posible porque la rejilla del pozo debió retenerlo y cuando marcaban al celular escuchaban sonar el timbre de la llamada.

El primer edil le contestó que solo lo autorizaría si el regidor se comprometía a pagar la reparación.

Entonces, Díaz Montero solicitó ayuda de la Dirección de Protección Civil para intentar recuperarlo. Con mazos, picos y barreta se abrió la banqueta y se descubrió que la rejilla no sostuvo el celular y éste cayó al fondo del pozo, de siete metros de profundidad.

Riesgo para empleado

Ante ello, Aguilar Arroyo ordenó a los empleados de Protección Civil suspender el rescate y retirarse del lugar, ya que, dijo, no arriesgará a ningún empleado para intentar recuperar un celular y que no vale nada en comparación con una vida.

“Son siete metros, no vale la pena arriesgar la vida de nadie; si fuera un perrito o gatito hasta yo me meto a rescatarlo, pero es simplemente un celular”, dijo el presidente municipal.

Díaz Montero señaló que no se cayó solo el celular, sino también tarjetas, credencial de elector y hasta la tarjeta del seguro de su esposa.

Al final, el edil no recuperó el teléfono de su esposa y, además, pagó la reparación de la acera, que estuvo cerca de 12 horas con un hueco.