Gordis hermosa, hace días que no puedo dormir, sólo me la paso pensando en la vecina de enfrente. El otro día vi que tendía sus chones y me la imaginé con ellos puestos. Lo gacho es que ambos somos casados. Te quiero contar mis deseos con ella, pero ¿qué tal si se lo cuenta a su machín?

Pedro Martín

Déjate de babosadas, sobrino, si los dos son casados entonces no busques problemas, aunque eso sí, no es sano quedarse con las ganas, para eso existe la jugada esa de jalarle el pescuezo al ganso, mejor compra tu ¡Al chile! y con el póster de La Neta has lo que se te venga… en gana con la amiga “manuela”.