Una niña de 9 años que fue reportada como desaparecida desde agosto pasado, por fin ha sido localizada pero lamentablemente muerta, esto gracias a la confesión de su asesino, un ex militar de 34 años.

Maelys de Araujo había asistido a una boda al este de Francia con su madre y su hermana el 26 de agosto pasado , luego de ahí nadie supo nada de ella hasta este miércoles que fue encontrado su cuerpo siguiendo las indicaciones de Nordahl Lelandais que confesó haberla matado “involuntariamente” pero sin declarar las causas especificas.

Lelandais reconoció que se “deshizo del cuerpo” pero dijo que hablaría más adelante sobre las circunstancias de la muerte de la niña.

Los investigadores necesitaron todo el día para dar con el cuerpo por las malas condiciones del lugar y la abundante nieve. “Los gendarmes y los perros permitieron descubrir el cráneo de la niña y un hueso”, precisó Coquillat.

Éste había negado el crimen. En septiembre los investigadores hallaron un rastro de ADN de la niña en el coche de Lelandais y la justicia lo imputó por presunto secuestro.

En noviembre, tras el análisis de imágenes de cámaras de seguridad en las que se vio a la niña dentro del coche partiendo de la boda y otra regresando el imputado a la boda sin Maelys, la fiscalía lo inculpó de asesinato.

Luego de seis meses de silencio, Lelandais fue audicionado este miércoles a su pedido y guió a los investigadores al lugar en donde se encontró el cuerpo de la niña.

“La investigación continuará”, dijo el fiscal, en particular para esclarecer las circunstancias de la muerte.

El fiscal explicó que este giro del sospechoso se debe al hallazgo de un rastro de sangre de la niña “debajo de la alfombra del baúl” de su vehículo, que fue desguazado por orden de los jueces de instrucción.

La justicia investiga además a Lelandais por su presunta implicación en otros casos de desapariciones que nunca fueron esclarecidos