La Fiscalía chilena y la Policía investigan las circunstancias en que un anciano de 94 años mató de un tiro a su esposa de 86 y luego se suicidó con la misma arma en Santiago de Chile, dejando una carta donde explicaba el motivo por el cual se quitó la vida junto a su pareja.
Los cadáveres de José Aedo y de su esposa, Blanca Sáez, fueron descubiertos en las últimas horas de ayer por una nieta en el domicilio de ambos, situado en el municipio de El Bosque, en el área sur de la capital chilena.
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El arma estaba legalmente inscrita a nombre de la esposa, dijo a los periodistas el comisario Eduardo Aros, de la Policía de Investigaciones (PDI).
En el lugar se encontró una carta en la que los esposos, que llevaban 62 años de matrimonio, explicaban que habían decidido quitarse la vida porque estaban cansados de vivir y de depender económicamente de su familia, compuesta por cuatro hijos y siete nietos. Además, señalaba que la esposa se encontraba muy enferma, según las fuentes.
De acuerdo con los vecinos y los propios familiares, no existen antecedentes de violencia familiar entre ambos y llevaban una vida tranquila y en armonía. Hace unos días habían acudido juntos a una consulta médica.
Según la nieta que encontró los cuerpos, sus abuelos se amaban y con frecuencia contaban que su deseo era estar juntos para siempre.
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“Toda la gente está impactada, toda la población por la muerte de ambos, porque no lo esperábamos. Ni siquiera lo podríamos haber imaginado. Era una pareja de tantos años, tienen hijos y nietos ya adultos”, comentó una vecina.
Lo de la carta, “es materia de investigación, esa evidencia está siendo levantada para los peritajes respectivos en el laboratorio de criminalística de la institución”, dijo el comisario Aros.
“De acuerdo con los antecedentes preliminares sería un feminicidio con posterior suicidio, cuya dueña de casa se le dio muerte por parte del cónyuge”, aseveró el investigador, aunque ni la Fiscalía ni el Ministerio de la Mujer e Igualdad de Género se han pronunciado al respecto.
