Envidia, odio y una terrible petición a los dioses, hicieron que una mujer impura se disfrace de una mujer bella, la mortal leyenda de la Xtabay
La Xtabay era mujer bella y encantadora, los hombres no podían resistirse a sus encantos, sin embargo también era bondadosa, noble y con un gran corazón; pero una terrible maldición tras su muerte la condenó a convertirse un ser fatal, naciendo la leyenda de la Xtabay.
Hace muchísimo años, cuando la civilización maya estaba en su pleno apogeo, existió una mujer con atributos encantadores, su belleza irradiaba un encanto particular.
Los hombres se rendía a su figura, ella, según algunos relatos, usaba a los hombres para obtener dinero, riquezas, comida entre otros objetos de gran valor.
Según se dice, su nombre provenía de la palabra “Xkeban”, cuyo significado es “Prostituta”, y fue presuntamente puesto por los lugareños.
A pesar de tener un terrible mote, sus acciones con los demás iban a la par de su increíble hermosura, ayudaba a las personas pobres con el dinero que obtenía.
Cuidaba los heridos y enfermo, también era muy popular entre los niños, ya que era muy amable y agradable.
No solo con las personas era buena, también cuidaba a la naturaleza y a los animales.
A pesar de su infinidad de amantes que le proporcionaba finas telas, joyas y una buena vida, existían personas que la menospreciaban por su forma de conseguirlas.
Una bella mujer de nombre Utz-Colel, veía con desdén a Xkeban. Utz-Colel, era conocida por venir de una buena familia, por vestir de forma correcta y decente.
Aparentaba ser una mujer virtuosa, noble y amable, sin embargo, esto estaba muy lejos de la verdad.
Su virtud era falsa, su orgullo enorme, a pesar de presumir pureza y virginidad, en su interior no había bondad, era de alma fría, impura, odiaba a los pobres y a los enfermos.
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Los años pasaron de forma efímera como los pétalos de una flor al marchitarse con el tiempo, Xkeban, dejó de aparecer en el pueblo.
Tiempo después, las personas se dieron cuenta de que un olor dulce, tan dulce que seducía a cualquiera, impregnaba el pueblo.
Las personas se pusieron a buscar la fuente de tan enervante aroma, hasta que vieron provenía de la casa de Xtabay.
Lamentablemente y para sorpresa de muchos, ella se encontraba muerta, custodia por animales que evitaban las moscas se acercaran a su cuerpo.
Utz-Colel, con gran enojo dijo: “¿¡Cómo una mujer tan impura puede emanar un aroma tan delicado?. Esto ha de ser obra de espíritus malos”
“Cuando yo muera de mi saldrá uno más delicado.”
Las personas que sintieron lastiman por Xtabay, la enterraron, en un acto de obligación y no de amor, tras los comentarios.
De su tumba brotaron flores blancas que despedían un aroma dulce, estas son conocidas como “Xtabentun”, flores con las cual se prepara la bebida del mismo nombre.
Muchos años pasaron tras la muerte de la Xtabay, hasta que un día, Utz-Colel murió. En su funeral las personas le recordaban por su virtud.
Sin embargo, otros no olvidaron sus palabras, por lo que esperaban que se cumplieran al pie de la letra.
Sin embargo, una desagradable sorpresa de llevaron, luego de enterrarla la tierra que la cubría despidió un olor fétido, a tal grado que ni los animales carroñeros se acercaban.
De su tumba no nacieron flores, sino un cactus muy espinoso conocido como “Tazacam”
Cuando Utz-Colel llegó al Xibalba, descargó toda su ira contenida, y le imploró a los dioses que la regresaran a la vida, sin embargo la maldad la invadió.
Ya que pidió regresa al mundo terrenal disfrazada con el cuerpo de Xtabay, Desde entonces Utz-Colel se oculta esperando entre la selva el paso de algún hombre.
Una vez seducidos los pierde para quitarles el corazón
Los más afortunados despiertan a la mañana siguiente abrazando un cactus, dicen que se oculta entre las ceibas, esperando a los hombres borrachos e infieles la encuentren y poder arrancarles el corazón.
“Si vez a una mujer peinándose con un cactus no te acerques, ya que es Utz-Colel disfrazada de la Xtabay”
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