Huay Pek
Imagen ilustrativa

Existen muchas leyendas y mitos en Yucatán y en general en México, yo no creía mucho en esas cosas, pero creo que conocí sin querer al Huay Pek

Todo indica que vimos un Huay Pek. Íbamos de Mérida, con rumbo a Tizimín, era de noche cerca de las once y volvíamos cansados luego de hacer compras y de unas consultas médicas y de visitar a la familia como cada 15 días. Inesperadamente en el camino ocurrió algo…

Habiamos degustado una rica cena familiar, nos despedimos y agarramos camino, la carretera estaba muy solitaria, pero muy tranquila y yo estaba acostumbrado a manejar por ahí, mi esposa iba a mi lado, ella siempre se preocupaba de que no fuera a pestañear.

Viajábamos nosotros dos, con nuestros dos pequeños gemelos y mi suegra en la parte de atrás del coche. Nunca habíamos tenido ningún problema; hasta esa noche, en la que ocurrió lo que ahora les voy a contar.

Vi el reloj, eran casi las once y media, y antes de pasar por Temax alcancé a ver por un instante que un animal se atravesaba frente a nosotros, era muy extraño, negro y mucho más grande que un perro. Estaba peludo, no pude ver detalles pero, pero sí su tamaño y silueta.

Iba en cuatro patas, pero sus patas no eran normales, eran muy largas y algo flacas, como las de una persona. Pensé que quizá fue mi imaginación, o era el cansancio que me hacía ver visiones. No quise decirle nada a mi mujer, pues es muy miedosa y además pensé que estaba dormida.

De pronto, ella me volteó a ver y me dijo ¿viste ese animal?; yo le pregunté ¿qué es lo que viste?. Y ella me lo describió de la misma forma en que yo lo vi. Ambos decidimos quedarnos callados, pues atrás iban durmiendo los niños y mi suegra roncaba, lo único que queríamos era llegar a Tizimín.

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No tocamos ya el tema, por algún tiempo. De pronto un día, vimos una nota en las redes, sobre que habían visto un “Huay Pek” rondando el sur de la región, y lo describían tal cual lo vimos nosotros.

Fue entonces que supimos que se trataba de un brujo que se convertía en perro, buscando en las redes, pude encontrar información, sobre distintas personas que lo han visto en otros lugares de Yucatán. No sabemos si sea el mismo, o haya varios, si sea agresivo o pacífico.

Simplemente, creo que tuvimos suerte mi mujer y yo aquella noche en haber conocido de cerca al Huay Pek. La ilustración es tomada del internet, pero es lo más cercano al extraño ser que vimos ese día al volver de Mérida a Tizimín.

La historia fue contada por Francisco Márquez en redes sociales.

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