Hace muchos años existió una historia de amor que nació dentro de las paredes del hospital Arzobispo Loayza en Lima, Perú, un doctor y una enfermera se habían enamorado locamente por lo que estaban a unos días de contraer matrimonio, sin embargo la muerte tenía otros y trágicos planes para ellos…

El novio había salido fuera de la ciudad para entregar las invitaciones de la boda a sus familiares, pero lamentablemente en su camino tuvo un fatal accidente de coche, donde perdió la vida, cuando su prometida enfermera se enteró, su mundo se vino abajo y perdió las ganas de vivir sin el… por lo que en su profunda tristeza decidió suicidarse aventándose desde el último piso del hospital, como el edificio se encontraba en remodelación había fierros punzocortantes en el piso, por lo que al caer la enfermera, su cabeza fue cortada por uno de los fierros y ella murió decapitada.

Conforme pasó el tiempo, se dice que el alma de la enfermera se empezó a manifestar en los pasillos y cuartos del hospital, pues muchos de los pacientes aseguran haber sido atendidos por una amable enfermera con uniforme de capa azul, cabe mencionar que el uniforme de capa azul se dejó de usar hace muchos años, lo más extraño de cuando describen a la enfermera, es que ninguno de los enfermos pueden recordar su rostro.

Los rumores dicen que el fantasma de la enfermera habita en el hospital para ayudar a las afligidos que la necesitan, así como le hubiera gustado haber ayudado a su prometido poco antes de morir; el otro rumor es que cuando fue decapitada, su cabeza nunca fue encontrada, por lo que la enfermera sin cabeza deambula por las instalaciones hasta que su cabeza sea encontrada y le den una cristiana sepultura…