En Yucatán, al menos siete personas murieron por el consumo de alcohol adulterado en Acanceh. Dos de los intoxicados permanecían hospitalizados hasta el lunes en estado crítico de salud.

Más de cien mexicanos han fallecido en los últimos días por ingerir alcohol adulterado, una tragedia que acontece en plena pandemia de coronavirus por el auge del mercado negro y la suspensión de la producción y venta de licores, que ha llevado a la escasez de algunas bebidas.

Decenas de ellos han fallecido en el estado de Jalisco, que es el estado antes de Yucatán, Morelos, Veracruz y después de Puebla con más víctimas por consumo de alcohol adulterado con un total de 38 muertes.

Funeral de un hombre que murió en Ajijic, Jalisco, por ingerior alcohol adulterado.- EFE

Según reporte de EFE, en Puebla, al menos 62 personas se intoxicaron en las últimas semanas después de consumir presuntas bebidas alcohólicas adulteradas. De los intoxicados, 50 fallecieron según un comunicado del gobierno local el jueves.

Morelos

En Morelos, al menos 18 personas murieron en las últimas semanas después de consumir alcohol presuntamente adulterado y hasta el jueves pasado otras 10 permanecían hospitalizadas y en condiciones graves.

En Yucatán, al menos siete personas murieron por el consumo de alcohol adulterado en Acanceh. Dos de los intoxicados permanecían hospitalizados hasta el lunes en estado crítico de salud.

En Veracruz, hasta ayer los reportes eran de cinco muertes por ingestión de alcohol adulterado, cuatro en la población de Rafael Delgado, y un caso en Tilapan.

Personas que asistieron al funeral de un hombre que murió en Ajijic, Jalisco, por beber alcohol adulterado.- EFE

Desde que se decretó la emergencia sanitaria el 30 de marzo, las empresas cerveceras y productoras de licores suspendieron su producción al no ser consideradas actividades esenciales, lo que ocasionó que los anaqueles y refrigeradores estén cada vez más vacíos, aunado a que algunos gobiernos, como el de Yucatán que encabeza Mauricio Vila Dosalordenó una ley seca que será levantada el 1 de junio.

“No hay cerveza”

En buena parte del país se lee  “No hay cerveza” en muchos establecimientos.

Esa sequía de alcohol es aprovechada por vivales para hacer pasar el alcohol etílico como el de caña a menor precio o incluso para vender alcohol metílico usado para la producción de insumos de construcción y pintura.

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Funeral de un hombre que murió en Ajijic, Jalisco, por ingerior alcohol adulterado.- EFE

Qué es

 ¿Qué es el metanol y qué efectos ocasiona en el cuerpo humano?

Una publicación de El País detalla que el metanol o alcohol metílico, también denominado alcohol de madera, se obtiene en la industria por destilación de la madera, a diferencia del alcohol etílico o etanol, propio de las bebidas alcohólicas, que se obtiene por fermentación de los azúcares o por destilación de los vinos.

Es un disolvente

El alcohol metílico se utiliza normalmente como disolvente orgánico de esencias y resinas naturales, en la síntesis de colorantes y de productos metilados, así como en la fabricación de plásticos, pegamentos y barnices.

Otros usos industriales del metanol son como disolvente, anticongelante, carburante (hay autobuses que lo usan como tal) y antidetonante.

Paradójicamente, también se utiliza para desnaturalizar el etanol (o alcohol etílico), a fin de impedir su uso en la fabricación de bebidas alcohólicas.

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Venta en una agencia de cervezas durante la contingencia.- Notimex

Ataca el nervio óptico

El alcohol metílico es peligroso, sobre todo por los efectos de un producto de su degradación en el organismo humano que se llama ácido fórmico.

Una parte del metanol es eliminado directamente por los pulmones y los riñones, pero el resto se difunde en el cuerpo y se concentra en los tejidos ricos en agua, como los ojos, donde ataca específicamente al nervio óptico.

La intoxicación aguda de metanol se manifiesta, en primer lugar, con mareos, cefaleas (dolores de cabeza), molestias en la visión, delirio y confusión mental.

Posteriormente, la intoxicación metílica produce convulsiones y, finalmente, sobreviene un coma.

Secuelas

En caso de supervivencia a una intoxicación aguda de alcohol metílico, las secuelas  como temblores y pérdida de agudeza visual persisten en muchos casos.

No existe ningún tratamiento particular ni se conoce ningún antídoto. La dosis que provoca la muerte es de 10.3 a 200 milílitros.

La lentitud con que se elimina del organismo hace del metanol un producto especialmente tóxico.

Incluso una dosis muy baja puede provocar una disminución de la visión si la intoxicación se repite con frecuencia, como ocurre cuando se produce por inhalación.

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