En las últimas semanas hemos visto como muchos artistas han aprovechado la tecnología para hacer shows en redes sociales, sin embargo no hay nada como estar entre tanta gente que comparte el mismo sentimiento que tú, en un concierto escuchando a tu banda o músico favorito.

Aunque muchos soñamos con volver a un foro grande, entre todos los vendedores de cervezas y personajazos que vemos en un concierto, parece que con este virus el futuro de los espectáculos en vivo está en el aire, sobre todo porque los expertos recomiendan que regresen hasta otoño de 2021 y algunos melómanos estadounidenses dijeron que no irían a una presentación con tanta gente hasta exista una vacuna contra el COVID-19.

En Dinamarca –como en todo el mundo– se están tomando medidas para evitar la propagación masiva del coronavirus, sin embargo un músico bastante creativo encontró la manera de tocar frente a miles de personas y ni siquiera utilizó el internet para dar su show, porque tocó en un autocinema… sí, como en los viejos tiempos. 

El nombre de este genio es Mads Langer, un cantautor que se volvió famoso mundialmente por el cover que hizo de la rola “You’re Not Alone” de la banda británica Olive. Como muchos, tuvo que parar el tour que tenía planeado en su país, pero a pesar de todo se le ocurrió dar este concierto para un montón de fanáticos los cuales se encontraban viéndolo desde la comodidad de sus coches.

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Así se realizó el concierto

De acuerdo con Forbes, lo que hizo Mads fue montar un escenario –como el de cualquier concierto– en las afueras de la ciudad de Aarhus y subirse a tocar sus canciones. El detalle está que en lugar de sonar directamente en los monstruosos monitores que son controlados por una enorme mesa de mezcla, el sonido se fue a la transmisión de una estación de radio. De esta manera los que estaban presentes podían escuchar mejor cada uno de sus acordes.

Aunque suene bastante extraño, parece que a Mads Langer le fue bastante bien con esta extraña presentación. Según medios locales, la policía del lugar dijo que era un gran gesto de apoyo para todos los que están enfrentándose al coronavirus o aquellos que lidian con el aislamiento social, y todos se portaron tan bien que cuando acabó el concierto tardaron media hora en irse de regreso a sus casas.

Por ahora no sabemos en cuánto tiempo volverán nuestros amados conciertos y festivales, pero al parecer esta es la experiencia más cercana que nos pueden ofrecer en estos momentos a un show en vivo. ¿Qué opinan? ¿Les late la idea o prefieren esperarse a que termine la cuarentena?

Con información de Sopitas.

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