sopa hirviendo en la cara

La agresora no quiso escuchar a la gerente y la atacó, ahora ya hay una denuncia en su contra y podría enfrentar cargos, informó la policía

La comensal estaba tan furiosa que encaró a la gerente del restaurante y le lanzó la sopa hirviendo en la cara, según la clienta, la sopa estaba tan caliente que derritió la tapa de su contenedor.

La agresora no quiso escuchar a la gerente y la atacó

La comensal, fuera de sí, encaró en la caja del establecimiento a la joven y le reclamó, por lo que ésta le ofreció un reembolso completo por el “detalle”.

La compensación además constaba de otra porción sin costo; sin embargo, algo parece molestarle a la agresora y le lanzó la sopa hirviendo en la cara.

Acto seguido, la mujer deja el recipiente en el mostrador y le dice a su acompañante que se vayan. La gerente del restaurante, identificada como Jannelle Broland, de 24 años, sale detrás de ellos.

Fue traumático y desgarrador

En entrevista con el Daily Mail, la joven contó que el hecho fue traumático y desgarrador, pues no lograba concebir cómo alguien podía atacar horriblemente a otra persona y después reírse.

Podría enfrentar cargos

Al poco tiempo llegó la policía, le explicó lo sucedido y presentó una denuncia por el ataque. De hallar a la responsable, ésta podría enfrentar cargos, de acuerdo con las leyes de Texas.

La joven relató que no tuvo lesiones de consideración, aunque la sopa picante estaba hirviendo, tras el ataque fue corriendo al baño y comenzó a limpiarse la sopa.

Una de sus compañeras del restaurante se quitó la blusa y se la dio, mientras ella se dejaba sólo la sudadera.

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¿Qué motivó la agresión?

Los hechos ocurrieron el pasado 7 de noviembre en el restaurante El Sol de Jalisco, en Temple, Texas.

La joven gerente, Jannelle explicó que primero la mujer la llamó furiosa para decirle que su sopa picante tenía plástico y ella le ofreció una disculpa por el incidente.

Sin embargo, la señora la interrumpía cada vez que la gerente le ofrecía el reembolso y una nueva porción del producto:

“”Estaba inconsolable, parecía no querer nada, solo reprenderme” dijo. Luego simplemente se acercó al mostrador, le volvió a reclamar y fue cuando le lanzó la sopa caliente en la cara, “se sintió como si me hubieran rociado gas pimienta”, agregó.”

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Con información de: El Heraldo de México