MÉRIDA.—A semana y media de concluir el 2018, Yucatán rompió el récord de más muertes por suicidio de su historia al llegar a 226 fallecimientos por esta causa.

La mayor cifra de decesos que se había registrado en Yucatán era de 220 y ocurrió en 2016.

Viene la etapa crítica

En lo que va del mes de diciembre suman 14 las muertes por esta causa y aún se entra a la etapa más crítica, debido a que por las festividades de Navidad y Año Nuevo suele registrarse un incremento de muertes por esta causa.

Se cree que por lo menos el estado cerrará el año con 230 muertes, una cifra sin precedente.

Mérida, al ser la capital del estado y donde se concentra la mayor cantidad de habitantes ocupa por mucho el primer lugar en incidencia al registrar el 56 por ciento de las muertes.

¿Dónde más?

Los otros municipios que tienen mayor incidencia son Kanasín, Umán, Progreso, Valladolid y Tekax, aunque en un total de 45 municipios de Yucatán se ha registrado al menos una muerte.

En promedio en la entidad cada 27 horas las autoridades ministeriales toman conocimiento de una muerte por esta causa.

Asimismo, Yucatán tiene 11.2 muertes por cada 100 mil habitantes.

Depresión, problemas familiares, principales motivos

Las personas del sexo masculino siguen siendo los que más atentan contra su vida con el 87 por ciento.

La mayoría de las víctimas se encuentran entre los 24 y 40 años de edad, es decir, es etapa productiva.

Los principales motivos son depresión, problemas familiares, rompimientos de relación, económicos y de salud.

Zonas Sur y Poniente

En Mérida, la problemática se encuentra focalizada en las zonas Sur y Poniente, aunque también han ocurrido cinco en la zona Norte.

De acuerdo con algunas fuentes forenses, las muertes están directamente relacionadas con el consumo del alcohol, debido a que en el 95 por ciento de las víctimas estas tenían altos niveles de alcohol en la sangre.

Asimismo, cerca del 80 por ciento de las víctimas habrían advertido a familiares, amigos o en sus redes sociales que se quitarían la vida, pero nadie le dio importancia.

En el marco de esta problemática en Yucatán, no existen programas enfocados a la prevención de estas muertes que cada vez son mayores.