Los colectivos trans empiezan a pugnar para que la infancia de primaria puedan definir su identidad de género, desde Yucatán Muxe afirma que es necesario
Ante su visita a Yucatán, la co-secretaria de la Coalición Mexicana LGBTTTI, Amaranta Gómez Regalado, afirmó que es necesario que en los estados se legisle en materia de identidad de género para niños de primera.
Explicó que sería necesario para evitar el bulling en muchos de ellos y puedan cursar sus estudios básicos con la identidad con la cual se identifican y “no con otra ajena a sus cuerpos”, señaló.
Este tema se ha tornado un tema polémico, incluso en estados como Oaxaca donde su legislación avanzó en materia del respeto de los derechos humanos para personas de la comunidad LGBTQ+, matrimonio igualitario, identidad de género, interrupción del embarazo, “pero la ley de identidad de género solo considera a la niñez hasta los 12 años”.
La antropóloga social, muxe transgénero, y activista LGTBI, manifestó que trabajan por el reconocimiento de identidad de género de niños y niñas que a los cinco o los seis años.
“Ahora es un debate muy fuerte porque las leyes de identidades de genero terminan negociando los intereses de la niñez, no los incluyen”, acusó.
Para la muxe transgénero afirma que la edad adecuada para que los niñas y niños puedan elegir que identidad tener, es a los siete años, “como en el caso de Argentina que lo tiene como ley”.
“Ahora tenemos un caso de los padres de una menor quiere que se modifique, por eso estamos haciendo un procedimiento en el estado de Jalisco y ahí es donde se está cambiando el acta de la niñez y entonces la ley es acta para que sea resguardada, y eso provoque una modificación en la ley de los estados”, manifestó.
Recordó que la lucha de la comunidad LGBTQ+ por el respeto a sus derechos como personas, después de no haberlo logrado en el marco nacional, “le dimos la vuelta para que en lugar de pedirlo nacional, nos fuimos estado por estado, que es donde se ha ido logrando, en el caso del matrimonio igualitario e identidad de género”.
Recordó que el avance de la armonización de las leyes, son 16 los congresos locales que no han aprobado la ley de identidad de género, mientras que en el matrimonio igualitario solo cuatro.
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Se arrepintió
Sin embargo, a pesar de que la activista pugne a favor del cambio de las leyes para que los niños y niñas puedan elegir su identidad de género, se da a conocer el caso de Susana Domínguez, quien después de seis años de haber cambiado su identidad de género se arrepintió de extirparse el útero y los senos.
La joven de ahora 24 años, manifestó que ella no era un chico en cuerpo de chica, como le había dicho cuando sólo tenía 15 años por un psicólogo, por lo que consideró que las hormonas y las operaciones habían sido una tremenda equivocación.
Susana había tardado seis años en darse cuenta de que quizás sus problemas mentales, que incluían depresión y trastorno esquizoide, la habían incapacitado para tomar la decisión correcta.
El relato manifiesta que le contó al psicólogo, que ella era y siempre había sido una mujer, pero una mujer con serios trastornos que nada tenían que ver con la transexualidad.
“¡Parecía que le molestaran mis problemas…! Yo era una adolescente con problemas y él mi terapeuta”.
Casos como el de Susana hace más polémico el tema de si los niños son capases de entender la magnitud de decidir una identidad de género contraria a la visible, deja la incógnita si legislar a favor a favor de una niñez trans sea lo más inteligente y en favor de la defensa de los derechos de la niñez.
