Un joven denunció que fue víctima de una agresión policial, pues los uniformados de Mérida lo agarraron a golpes, le robaron y lo detuvieron
Mérida.- Nuevamente la Policía Municipal de Mérida se encuentra bajo la mira del público, pues recientemente se dio a conocer un presunto caso de abuso policiaco contra un joven, a quien golpearon, le robaron su celular y lo mandaron al tambo.
Basándose en lo relatado por Randy M.V., el hecho ocurrió el pasado lunes 6 de noviembre, aproximadamente a las tres de la tarde y tuvo lugar en la calle 60 por 49 del Centro Histórico de Mérida.
En donde el joven, en compañía de su pareja y su suegra, habían salido de la subasta “El arte por la educación” de Impulso Universitario, hasta que un debido momento dos sujetos los comenzaron a agredir, pues les gritaban a ambas mujeres.
Debido a esto, el joven salió en defensa de su pareja y su suegra, y fue así que los agresores lo atacaron a golpes y posteriormente se dieron a la fuga del sitio.
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Minutos después, el joven dio aviso a las autoridades y al sitio se presentaron entre 6 ó 7 agentes municipales, a quienes Randy les explicó lo sucedido, pero ellos no quisieron cumplir con su labor.
Por lo que Randy se decidió por grabarlos, lo que molestó a los uniformados y lo agredieron, según comentó el joven a través de un video difundido en redes.
Doña Linha Violeta N.G., la suegra del joven, nos chismeó que después de la agresión por parte de los oficiales, estos le quitaron el celular y lo detuvieron con lujo de violencia.
Golpearon al joven, le robaron y lo detuvieron
Sin embargo, una agente de la misma corporación se acercó a ella y a su hija, a quien cuidaba, y les dijo que los tres iban a ser detenidos al menos que ella y su hija se fueran en un taxi.
Ante esto, tanto la madre, como la hija, se retiraron del sitio en una nave rentada, esperando resolver este asunto al día siguiente.
La madre del joven fue quién acudió a rescatarlo, indica la señora Linha, y grabó el video en el que el joven agredido indicó que sufrió graves lesiones en el hombro y el brazo, y que al parecer resultó fracturado, además de una grave lesión en el tabique nasal.
“Me quebraron la nariz, la tengo toda ensangrentada. Me quebraron seguramente el brazo, porque no puedo moverlo ni lo siento; el hombro está completamente inmovible… me robaron mi teléfono”.
Linah indicó que la Policía Municipal de Mérida les comentó que al parecer no había registro de la detención y que no entendían por qué lo habían dejado tanto tiempo encerrado.
El joven aseguró que “no puede ser posible que un yucateco pida auxilio a la misma Policía, y que sean los mismos policías los que me desgracien y me lastimen, solo por sacar y ejercer mi derecho de filmar para evidencia de lo que está ocurriendo”.
Finalmente, Randy acudió el mismo lunes a interponer su denuncia ante la Fiscalía por la agresión que sufrió presuntamente a manos de los uniformados municipales.
Lo que dijo la Policía de Mérida
Con relación al vídeo que circuló en redes, la Policía Municipal de Mérida descartó cualquier tipo de abuso de autoridad hacia esta persona, indicando que hasta se le brindó la atención inmediata mediante los paramédicos.
La corporación policiaca remarcó que el video no refleja la realidad de los hechos, pues comentaron que nunca se incurrió en abuso de autoridad.
Informando que, cuando los agentes arribaron al sitio e percataron que una persona del sexo masculino, R.M.V, se encontraba en estado de ebriedad y con sangre en el rostro, producto de una herida que tenía en el tabique nasal.
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El lesionado indicó que había sido agredido hace unos instantes por dos personas, y el joven proporcionó sus características, por lo que de volada se implementó un operativo de búsqueda para encontrar a los presuntos agresores.
Después los oficiales solicitaron apoyo de los paramédicos, con el fin de que se brindara atención al joven que estaba herido, quien se encontraba acompañado por dos mujeres.
Cuando llegó el paramédico, el lesionado asumió una actitud agresiva e insultó a los elementos policiales, negándose a recibir el apoyo médico. Al joven en reiteradas ocasiones se le indicó que guardara la calma, pero hizo caso omiso, por lo que los oficiales procedieron a su detención y traslado a la Cárcel Municipal.
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