Con porras y muestras de respaldo, pero también con un enérgico llamado de auxilio para rescatar al mercado Lucas de Gálvez, fue recibido el candidato a la alcaldía de Mérida, Jorge Carlos Ramírez Marín, por locatarios de esa central de abastos que van de picada en sus ventas.
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Al ver con buenos ojos sus propuestas de darle un nuevo giro a los mercados de la capital yucateca, le dijeron al abanderado del PRI-PRD que no podrían soportar otros 3 años de una mala administración.
“Tenemos que darles la importancia que tienen, son un espacio tradicional de la ciudad que da cabida a cientos de comerciantes, lo que significa muchos empleos y muchas familias que dependen de este. Regresemos la dignidad que deben de tener”, indicó el candidato.
Por su parte, doña Candy, quien desde hace 8 años vende ropa típica ahí, señaló que una de las principales quejas es la condición de los techos, pues su mal estado provoca que las lluvias se filtren.
“Según nos dijeron, los techos los cambiaron, pero nunca quedaron bien. Cuando llueve se inunda. Yo puedo resguardar mi ropa, pero si no tenemos cuidado y las colgamos, cuando la lluvia cae, nos moja todo”, relató doña Candy.
De igual forma, doña Wendy Calderón, locataria del Lucas de Gálvez asegura que el tema de la higiene y la limpieza dentro de las instalaciones deja mucho que desear.
“Está muy sucio y hace falta que fumiguen, tenemos muchos animales como cucarachas, ratones y todo tipo de cosas andando por los pasillos”, manifestó doña Wendy.
Es por ello que están a favor de darle un nuevo rumbo a la administración municipal, como propone Ramírez Marín, porque los que ahora están al frente ya están en su zona de confort y no se preocupan por resolver los problemas.
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